lunes, 15 de marzo de 2010

Dos incendios provocados causan diversos daños materiales en la piscina de Vilagarcía

Agentes de la Policía Nacional de Vilagarcía han abierto una investigación para localizar a los individuos que en la madrugada de ayer provocaron dos incendios en las instalaciones de la piscina y del gimnasio municipal, en Fontecarmoa. El suceso tuvo lugar al filo de las cuatro de la mañana cuando la concesionaria recibió el aviso de la central de alarmas.
Según fuentes policiales, los vándalos actuaron en dos puntos distintos aunque siguiendo el mismo patrón. Al parecer, primero rompieron uno de los ventanales exteriores de la piscina hacia donde arrojaron una gran cantidad de combustible para, posteriormente, prenderle fuego.
Pese a lo aparatoso del incidente, las consecuencias en este punto del edificio fueron prácticamente nulas por lo que los operarios sólo tuvieron que proceder a la limpieza para facilitar el normal funcionamiento del servicio a primera hora de la mañana.
El otro punto afectado se focalizó en las dependencias del gimnasio donde utilizaron el mismo "modus operandi" aunque, en esta ocasión, con daños mucho más cuantiosos. De hecho, se quemaron algunos de los paneles de madera que revisten el interior de la sala, al mismo tiempo que se vio afectado diverso material deportivo.
Los dos incendios movilizaron tanto a una dotación de los Bombeiros do Salnés como a varios efectivos de la Policía Nacional que se desplazaron de inmediato hasta el lugar para intentar sofocar las llamas y evitar que estas se extendiesen por el complejo deportivo. La rápida actuación de los servicios de emergencia posibilitó que los operarios de limpieza contratados por la empresa concesionaria tuviesen tiempo más que suficiente para limpiar los desperfectos ocasionados por los actos vandálicos, lo que no impidió que el complejo polideportivo abriese sus puertas a la hora habitual.
Aún así, la única incidencia reseñable en cuanto a la actividad del centro es que las distintas partes del complejo se abrieron de forma gradual, aunque a media mañana los usuarios podían acudir sin problema y sin que se viesen modificados sus hábitos.
Por el momento, y después de los hechos acontecidos ayer, desde el Concello de Vilagarcía han anunciado que cursará una denuncia contra los individuos que provocaron los serios destrozos que aún no han sido cuantificados en términos económicos.
El procedimiento es que, ahora, la concesionaria elabore un informe en el que se especifique el material afectado así como la valía económica del mismo. Este documento se le remite a continuación al Concello para que el abogado municipal formule la denuncia en el Juzgado alegando daños en propiedades y bienes públicos.
Varias opciones
El de ayer es el segundo atentado en apenas dos semanas que se realiza contra el complejo polideportivo de Fontecarmoa. El primero ocurrió hace unos días cuando dos encapuchados entraron en las dependencias municipales para verter pintura en la bañera principal de la piscina mientras varios usuarios la estaban utilizando. El suceso obligó a la empresa concesionaria a desalojar el lugar y a cerrarlo a la espera de que todo fuese debidamente desinfectado.
Fuentes municipales reseñaron ayer que una acción similar se registró también en la piscina de Pontevedra por lo que atribuyen el caso vilagarciano al conflicto laboral que existe a nivel gallego por la huelga causada por el cese en las negociaciones del convenio colectivo de trabajadores de instalaciones deportivas.
A día de hoy, y al contrario que otras muchas instalaciones deportivas de Galicia, la de Vilagarcía funciona normalmente y sólo con pequeños cierres periódicos y anunciados debidamente por el personal. Es por ello que las investigaciones se centran ahora en la actuación de posibles piquetes que, al parecer, han querido provocar el cierre de las instalaciones de Fontecarmoa.

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